Les va bien, porque con poco, intentaron más, consiguieron más. Arrebataron todos esos deseos superfluos y los convirtieron en carbón, en hecho, parte de una realidad. Movilizaron cada centímetro de su cuerpo para imponer un estado y los objetivos cumplidos están a la vista de todos, del que estudia, del que no, del que ríe de que cree ser parte de un contexto.
La realidad, todas sombras del ayer.
La realidad, todas sombras del ayer.
No hay comentarios:
Publicar un comentario