En el vacío

Un rincón del ensueño que se ve acomplejado con un piano sonando y un extraño olor a nafta que se incrementa, provoca dolor de cabeza, sola en toda la casa, y la ventana no ventila, el calor se hace mayor, no entiende, no razona, estos hechos inesperados en los que su imaginacion o la falta de ella no tuvieron que ver.

Enceguecida realidad.

Objetivos que se desvanecen a tan solo dias de cumplirlos, negatividad que por naturaleza aparece y derrumba todo a su paso, piensa en las viejas ideas que no se realizaron por miedo a su fracazo.
Ahora, en la felicidad arrancada, solo se puede hacer una cosa: nada.
Llorar? Para qué? Involuntariamente lo hago, porque esta caja de carne me obliga, me obliga a pensar, a sentir las cosas y a soñar con que se pueden realizar.
Ya, debería haber aprendido a no apostar sobre nada más.
Chau verano, chau fiesta de 15.
A las cosas que uno le dice Chau, fue porque alguna vez, las esperó con un Hola.
No más, ya no mas de esa clase de sueñitos pelotudos, qué falta? que crea en peter pan? Por favor, Fernanda, a veces sos tan patética! Creiste que algo en tu casa iba a cambiar? Creiste te iban a respetar de una vez por todas? Creiste a que a pesar de los quilombos, vos, ibas a salir ganando mientras los demas estan atendiendo a una vieja en el hospital?