Soy de la generación que ya vio y fue todo, que vio a Maradona retirarse del fútbol, que escuchó a Charly recuperado, que nació en democracia durante el resurgir del neoliberalismo y también repudió a sus propulsores cuando escapaban en helicóptero.
Vi cómo hombres y mujeres se reflejan en un mismo espejo hacia la igualdad, cómo recuperaron más de 100 nietos las Abuelas de Plaza de Mayo, cómo se cayeron las Torres Gemelas, cómo le entregaron el premio Nobel de la Paz a un hombre que después se enorgulleció de matar a un ''terrorista'' y tirarlo al mar.
Vi cómo se desmigajaba el modelo mamá-mujer, papá-varón, hijo e hija para al fin aceptar a las parejas homosexuales y los segundos matrimonios.
Todo esto pasó, se festejó/padeció y se consumió.
¿Qué nos puede quedar por decir? ¿Qué podemos dar de distinto a lo que ya vimos (dieron) ?
Es frustrante ver que todo ya está pensado, embalado, publicado y vendido, No hay ideas, no hay inventiva, saber que no tenés ni un solo motivo para decir: la sociedad cambió por mi aporte.
Soy consciente de mi era y agradezco a la cigüeña a que me haya entregado en el siglo XXI donde por lo menos manejar las diferencias son moneda corriente y los tabúes (sexuales, principalmente) son un diálogo cotidiano.
Vos que naciste en los 90' como yo, imaginate por un segundo en los 70' pero no, no la imagen yankee de los hippies cantando felices We are living in a yellow submarine. Miralo desde acá. Milicos por todos lados, conservadurismo que terminó fusilando las mentes de nuestros padres y abuelos.
¿Realmente te hubiera gustado nacer en los 70? Visto desde hoy, esas generaciones pensantes, tenían una libertad inigualable: el conocimiento. Pero la peor arma en contra: El Estado.
Vuelvo al 2011, al aula donde estoy sentada pensado todo esto, miro a mis compañeros de curso, me quejo de que no piensan mas allá de cuánto se van a tener que esforzar para conseguir que algún amigo los haga pasar gratis al boliche de moda siendo menores.
¿Qué realidad me rodea? ¿Es nuestra culpa que sea así? Vivimos el momento, y está bien, los 16 años son para eso, podríamos aprovechar que todo está justificado por la rebeldía, pero no, los ''grandes'' siempre van a culparte por eso, por estar demasiado callado, demasiado alterado, demasiado felíz, demasiado deprimido.
- El me dejó
-Dejate de joder, ya vas a encontrar otro, ¿ y sabés cuantos más te van a dejar?
La gente grande siempre piensa que el ''niño herido'' de hoy, no importa. Siempre puede haber algo peor, y justamente ahí es donde te encuentran un defecto.
Las cosas nunca salen completas.
Te faltó estirar la cama - dejaste un vaso en la pileta sin lavar - le falta un poco de sal - te podrías haber sacado una nota mejor - ya saliste la semana pasada, ¿por qué tenés que salir de nuevo?
Las arrugas en sus caras son proporcionalmente directas al número de quejas realizadas en el día. Hasta podría decir que llevan mi nombre.
¿Cómo podríamos pensar en un cambio social cuando ''siempre hacemos todo mal''? (según ellos.)
Me resisto ante tanta negativa, de alguna forma hay un paso, habrá ideas porque hay un nosotros.
Por eso, somos tan libres entre nosotros, porque no nos prejusgamos (tanto). Somos adolescentes de la generación...¿ Z ? Se llame como se llame, tampoco no pretendo usar un nombre impuesto por los medios de comunicación que justamente están dirigidos por aquellos que nos rotulan en cada actitud que tenemos.
Mi generación, perdida entre sí misma como tantas otras, padece las consecuencias de los errores de los adultos, que incluso se olvidaron cómo era pararse en este lugar y salir a la calle con el peso en la mochila. Por eso descubro que justamente ahí está la verdad de la milanesa: la falta de memoria.
Señores padres, docentes y tutores a cargo ¿Qué tan perfectas les salían las cosas a mi edad? Qué tan despreocupados estaban cuando sus ''noviecit@s'' los dejaban? ¿Cuántas botellas de alcohol escondían abajo de la cama? ¿Cuántas noches dijeron que iban a volver temprano? ¿Cuántas veces mintieron sobre sus notas?
Pasaron 30 años pero el olor a cigarrillo se sigue tapando con perfume.