Fieles

23 noviembre 2012

Cíclopes

No sé dónde nos paramos,
o sobre qué nos sostenemos,
si nuestras piernas caminan por inercia
o la ruta las empuja.
No sé de qué color es mi sangre
o si todavía te acordás de mi sonrisa,
si mis palabras caen,
o te las regalo;
poque más no tengo,
que la ingenuidad de un rostro
blanco, pueril, sncero.

Vueltas que no valen sin su eje
y la ronda se achica si me acerco,
donde tus ojos se borronean.
Respiro tu aire,
vicio de ideas sueltas.
Me acerco,
me choco,
atraviezo la cuarta pared,
suelto los párpados
siento sin aire,
un sabor encerrado.