Fieles

02 mayo 2010

Razón

2/5/10

No, nada cambió, no lo recuperé. Y está bien, porque eso demuestra que tengo que ser responsable, que lo que me rodea no puede dejar de girar porque yo no tenga ganas de levantarme.
Cometí el mismo error dos veces, la segunda vez me di cuenta antes, pero no a tiempo. A veces, hay que tener en cuenta que no basta con reconocer los hechos para que los demás nos perdonen, a veces los demás no tienen por qué perdonarnos, y así las cosas siguen, intentando no ser lo de siempre.

No hay comentarios:

Publicar un comentario